Reseña | «Cómo se hace una película» de Claude Chabrol y François Guérif

Claude Chabrol (1930-2010) fue uno de los directores de la llamada Nouvelle Vague —junto a otros cineastas como Jean-Luc Godard, François Truffaut, Éric Rohmer, Agnès Varda, Louis Malle, Alain Resnais o Jacques Rivette—  un grupo de críticos de cine que colaboraban en la revista francesa Cahiers du Cinéma reconvertidos en directores de cine que revolucionaron el cine francés de la segunda mitad del siglo XX. Junto a su colega Éric Rohmer escribió el monográfico Hitchcock (1957) una de las más tempranas reivindicaciones de la figura y la obra del director británico. Entre sus cincuenta y siete películas se encuentran obras como Accidente sin huella (Que la bête meure, 1969), El carnicero (Le boucher, 1970), Los fantasmas del sombrerero (Les fantômes du chapelier, 1983), Pollo al vinagre (Poulet au vinaigre, 1985), Inspector Lavardin (Inspecteur Lavardin, 1986) o La ceremonia (La cérémonie, 1995) que me causaron una honda impresión y es por ello que me decanté por leer este breve texto chabroliano que tengo entre manos.

Cómo hacer una película es un opúsculo en el que Chabrol nos relata de forma sucinta cómo se debe acometer el rodaje de una película desde el más primitivo estadio de la preproducción hasta, una vez finalizado el rodaje, los detalles a tener en cuenta para la distribución del largometraje. Con sus más de cincuenta años de experiencia en el mundo del cine Claude Chabrol da su opinión sobre aspectos de la realización y posibles dificultades que pueden ir surgiendo durante el rodaje, sobre las ventajas de adaptar una historia ya existente o realizar una original, sobre las ventajas de rodar en escenarios naturales o en estudio, etc. Además de repasar la relación del director con el resto del equipo como el director de fotografía, los técnicos de sonido e iluminación, la script, los productores o el reparto. Es un texto brevísimo que en principio en el que apenas habla de su propia obra, apenas menciona un puñado de sus películas como El bello Sergio (Le beau Serge, 1958), Una doble vida (A double tour, 1959), Landru (1963), El tigre (Le Tigre aime la chair fraiche, 1964), El tigre se perfuma con dinamita (Le Tigre se parfume à la dynamite, 1965) o Dr. M (1990), sin entrar nunca en profundizar en ninguna de ellas, simplemente para utilizarlas como ejemplo alguna vez. Pero parece más que obvio que en las ochenta y ocho páginas de este librito no hará más que esbozar algunas ideas y dar pinceladas y pistas sobre su estilo cinematográfico.

Esta obra no pretende más que hablar sobre la creación de filmes y sobre todo lo que un director debe de tener en cuenta para llevar a buen puerto su proyecto, siguiendo el precepto de que el director es el autor del la película, dando consejos para sortear las dificultades que vayan surgiendo a cada paso. Por desgracia no es un diario de rodaje de ninguno de sus largometrajes y parece más un texto orientado a aquellos que quieran empezar a dirigir películas más que a un público generalista, pero en realidad el tono didáctico del mismo lo hace accesible a cualquier persona interesada en el cine puede leerla y conocerá a través de este textito todas las vicisitudes que hay que sortear para crear un largometraje.

Es una lectura liviana que se lee en un salto, pero a pesar de la brevedad del texto contiene varias meditaciones interesantes como la diferencia entre películas de «reflexión» y de «sensación», la diferencia entre el « director narrador» y el «director poeta». Cómo hacer una película es simple y llanamente la humilde reflexión sobre su oficio de un cineasta con más de cincuenta años de profesión a sus espaldas, pero en la que se permite meter algunas ideas sobre lo que para él es el la creación de una película. Por lo tanto no es ni pretende ser una sesuda disertación sobre el cine ni sobre su poética cinematográfica, es la opinión un hombre que disfrutaba haciendo películas.

Desde mi humilde punto de vista no es una obra de referencia ni de consulta ni tan siquiera la obra más atrayente del propio Chabrol —solo hay que pensar en los artículos que escribía para Cahiers o en el monográfico dedicado a Hitchcock escrito al alimón con Rohmer—, pero sí es entretenida y curiosa puesto que relata prácticamente todos los pasos a tener en cuenta para filmar una película. Sin embargo se echan en falta que profundizara más en algunas cuestiones y más anécdotas y referencias sobre sus rodajes. Pero es que este libro es simplemente una entrevista que François Guérif realizó a Claude Chabrol, por lo que no podemos pedirle más de lo que es. No obstante contiene algunas reflexiones interesantes sobre su método de trabajo y sobre el arte de hacer películas que justifican su lectura.

Cierro el libro con un sabor agridulce en la boca, pues me ha parecido demasiado corto y me ha sabido a poco para lo que daba de sí el tema, pero al mismo tiempo dejo el libro en la estantería con la satisfacción de haber aprendido algo más de cine de la mano del maestro Chabrol.

Ficha técnica:

Título original: Comment faire un film. 

Autor: Claude Chabrol y François Guérif.

Número de páginas: 88.

Editorial: Alianza Editorial.

Año: 2004.

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